martes, 25 de mayo de 2021

Artículo final sobre la Didáctica de la Lengua Castellana

Y después de unos meses de recorrido a través de cada uno de los contenidos de la asignatura y el reto que ha supuesto compartir todo lo aprendido a través de las publicaciones en este blog, el curso ha llegado a su fin. 

Sin lugar a dudas, ha sido un camino de aprendizaje, pero también de reflexión. El trabajo llevado a cabo en cada de los bloques de la asignatura nos ha enseñado todo lo que nos brinda nuestra lengua, pero también nos ha ayudado a recordar algunos aspectos que teníamos olvidados, como la forma en la que nosotros aprendimos esta asignatura. 

Sin embargo, también nos ha mostrado que existen otras muchas formas diferentes y motivadoras de impartir la asignatura de Lengua Española para que la enseñanza de esta no siga anquilosada en el tiempo. Pero, para ello, está claro que la función del maestro es la clave; su formación, motivación e ilusión es lo que puede contribuir a que esta asignatura deje de ser rechazada por nuestros alumnos por considerarla aburrida. 

Como futuros docentes, “Didáctica de la Lengua Española” nos ha mostrado las herramientas necesarias para que nuestros alumnos puedan aprender disfrutando, así que ahora está en nuestras manos no perder el tiempo y hacer posible este cambio tan necesario en la didáctica de la lengua. 

Y ahora, ¿Qué os parece si hacemos un breve repaso de todo lo que hemos aprendido durante este tiempo? 

BLOQUE 1: Lenguaje, lengua y comunicación oral. 

En este primer bloque de la asignatura comenzamos distinguiendo entre lengua y lenguaje, así como del proceso de adquisición del lenguaje. 

Desde el mismo momento de su nacimiento, el niño recibe sonidos o gestos que posteriormente empezará a trasmitir. Posteriormente, este proceso continuará en la escuela y con la relación entre los iguales. Sin embargo, para que esto pueda producirse, es necesario que el niño pueda comunicarse. 

No podemos olvidar que, aunque el proceso de adquisición y desarrollo del lenguaje de un niño es muy complejo, al intervenir factores tanto biológicos, psicológicos y ambientales, para que exista la comunicación ha de existir reciprocidad comunicativa, es decir, diálogo. 

Posteriormente descubrimos que pese a lo importante que es la expresión oral en Educación Primaria, desafortunadamente no se le da el lugar que se merece en el currículo, ni aún así en el área de Lengua se enseña de manera intencional. 

Como profesores, no podemos ser los únicos que hablan en clase; para ser un buen comunicador, es necesario hablar, pero no de cualquier forma, sino que es necesario conocer una serie de estrategias. No podemos pretender que nuestros estudiantes adquieran una serie de competencias lingüísticas si no les han enseñado o mejor aún, si no las han practicado.

Resulta imprescindible crear situaciones de diálogo durante toda la etapa de Primaria, no limitándonos a sólo emplear el área de lengua para tal fin, sino que tenemos que recordar el carácter multidisciplinar de la comunicación oral, así como que en la escuela estamos preparando a nuestros alumnos para la vida social, y esto implica que tendrán que emplear la comunicación oral en muchas esferas de su vida, para lo cual habrán tenido que recibir pautas o estrategias  por parte de los profesores para que este proceso de comunicación y comprensión oral pueda llevarse a cabo de forma adecuada. 

Es importante, además, que entendamos que oír y escuchar no es lo mismo. Oír es percibir sonidos y es una actividad pasiva; mientras que escuchar es captar e interpretar el mensaje del interlocutor dando sentido a lo que oye. Así se hace imprescindible que los niños aprendan a escuchar, no sólo a oír, a través de la comprensión oral que apenas se trabaja en el aula. 

Conviene recordar que un proceso de intercambio comunicativo implica no sólo la transmisión de ideas o conocimientos de un tema determinado, sino también de emociones y sentimientos. 

Resulta fundamental que podamos crear situaciones de diálogo tanto individuales como en pequeño y gran grupo sobre temas afines a sus intereses, motivadores, que conozcan, y que se acerque lo más posible a su realidad, que les ayuden a reflexionar o despertar su pensamiento crítico; enseñándoles que todo proceso de comunicación debe realizarse dentro de un clima de confianza, con el máximo respeto hacia la persona hablante, donde no exista el miedo a equivocarse, sufrir descalificaciones o interrupciones, ya sea por parte de otros alumnos o incluso del profesor. 

También es muy importante que los niños realicen autoevaluaciones y reciban evaluaciones tras sus intervenciones orales a través de rúbricas para que conozcan sus puntos fuertes o débiles, pautas de mejora o felicitaciones que les motive a seguir mejorando cada una de sus intervenciones para ser un buen comunicador.  

 Para llevar a la práctica todo lo aprendido en este bloque, Irune nos propuso una actividad para trabajar la comunicación oral en gran grupo atendiendo a varias particularidades de dos alumnos, uno que no participaba en los diálogos, y otro que no respetaba e interrumpía la clase constantemente. 

El tema que yo elegí para dialogar en clase fue “¿Clases presenciales u online?”, ya que, durante mi período de prácticas, este tema siempre estuvo presente en 3º de Primaria y habría sido digno de debate. 

Esta actividad me pareció muy interesante y enriquecedora, ya que supuso imaginar todo lo que nosotros haríamos para trabajar la expresión y comprensión oral en un aula heterogénea con dos claros ejemplos de niños con los que nos podemos encontrar a diario. 

Tras esta actividad descubrí lo importante que es tener en cuenta los aspectos evolutivos de los niños así como los temas que pueden resultarles más interesantes y sobre los que tengan conocimiento para que puedan dialogar libremente sin miedo a equivocarse; la necesidad de enseñarles lo importante que es escuchar y respetar las opiniones de los compañeros;  que todos se sientan escuchados y respetados; así como fomentar en el aula tiempos de diálogo, por muy breves que sean porque a ellos les encanta compartir sus impresiones, solo hay que darles la oportunidad para que lo hagan. 

Aún recuerdo durante mis prácticas, que, aunque en clase no realizamos ningún debate, prácticamente todos los días había un ratito de “charla”; así lo llamaba uno de ellos, en el que la tutora les preguntaba cómo se encontraban o que tal había ido el fin de semana. Aunque la gran “charla” era el momento de tutoría. Entonces, todos se calzaban sus “botas silenciosas”, cogían su silla, la colocaban en círculo y la tutora presentaba un tema. Uno de ellos fue los hermanos, todo lo que nos aportaban, y fue muy gracioso escuchar lo que opinaban cada uno de ellos, y descubrir como en todo momento se fomentaba el respeto hacia los demás, levantando la mano, guardando silencio, no interrumpiendo, no permitiendo las burlas…Como bien decía mi tutora, a los niños los escuchamos poco, siempre hablan los profesores, y estos ratitos eran insustituibles. 

BLOQUE 2: Comunicación escrita: la lectura. 

En este segundo bloque aprendimos que la lectura es una de las cuatro habilidades lingüísticas básicas que el alumno debe aprender, desarrollar y perfeccionar en las diferentes etapas educativas, pero, aunque haya sido la más trabajada, no se ha hecho correctamente. 

“Leer no es simplemente descodificar un escrito. Leer es interpretar, es comprender, es relacionar, es tomar partido” (Labajo, 2021)

La competencia lectora debe ser conocida y entendida por maestros y profesores de todas las áreas curriculares, no sólo del área de lengua. De ahí la importancia de que los profesores sepamos trabajarla bien y una vez más, basarnos en los aspectos motivaciones de nuestros alumnos, para que puedan llegar a comprender desde una receta de cocina al enunciado de un problema en matemáticas. 

La lectura no es un proceso sencillo, se trata de un acto de comunicación escrita a través del cual el lector descodifica y le dota de significado (denotativo y connotativo) a un texto, así se producirá la comprensión. 

Pero, lejos de lo que veníamos pensando tradicionalmente, la verdadera lectura comprensiva es ideovisual, basada en fijaciones, silenciosa, no oral, para la cual el acto lector utiliza los procesos de comprensión, atención y memoria, las tres actividades principales de la mente y que debemos ejercitar para favorecer la lectura, y, por tanto, la comprensión. 

En contra, la lectura oral (en voz alta) es un acto de expresión, no de comprensión, pues leemos para que nos comprendan. Por este motivo, la lectura silenciosa y la lectura oral deben trabajarse por separado. 

La lectura en voz alta no es fácil, y por eso tenemos que prepararla previamente utilizando la lectura silenciosa para comprender lo que vamos a comunicar a los demás y para que estos puedan comprendernos. Para ello, deberemos prestar atención a no equivocarnos, a mantener un ritmo y entonación adecuados, no juzgar, no exagerar y ser fiel al pensamiento del lector. 

En la lectura en voz alta utilizamos la ruta fonológica. Se utiliza la conversión grafema-fonema, es decir, se identifican las letras y se transforman en sonidos, por eso este tipo de lectura es más lenta que la lectura silenciosa y deben trabajarse por separado. 

En la lectura silenciosa (la que utilizamos habitualmente) utilizamos la ruta ideovisual basada en fijaciones, y su objetivo fundamental es la comprensión. Así, lo que “pretendemos es comprender con la mayor velocidad y la menor dificultad el mayor número posible de palabras y, por lo tanto, relacionar las ideas del texto con las propias experiencias y elaborar el propio significado: lo que a nosotros nos dice ese texto”. 

Por otro lado, resulta fundamental distinguir entre memorización y comprensión, ya que en muchas ocasiones creemos evaluar la comprensión cuando lo que realmente hacemos es evaluar la memoria a corto plazo. Cuando trabajemos la comprensión debemos enfocar las preguntas a la idea global del texto, a la intencionalidad del autor, a las inferencias comunicativas, etc., no a los detalles que tanto los niños como nosotros olvidamos.

Pero ¿y cómo enseñamos a leer a nuestros alumnos? 

Como docentes, debemos conocer que existen diferentes métodos para enseñar a leer, con sus ventajas e inconvenientes, y que debemos seguir la misma línea que la utilizada en educación infantil, momento en el que los niños se inician en la lectoescritura. Estos métodos son los sintéticos, analíticos y mixtos. 

Métodos sintéticos: Trabajan de la síntesis al análisis, de las partes más pequeñas como las letras, a las mayores, las frases. Se dividen en: 

-alfabético (letra-sílaba-palabra-frase)

-fonético (sonido/letra-sonido/sílaba-sonido/palabra-sonido/frase) 

-silábico: toman como base la sílaba 

Métodos analíticos o globales: Trabajan el análisis de los elementos desde los mayores a los menores. Se dividen en: 

-Fraseológico (frase-palabra-sílaba-letra)

-Contextual (texto-frase-palabra-sílaba-letra)

-Léxico (palabra-sílaba-letra)

Métodos de base mixta: Utilizan elementos y técnicas de los métodos analíticos y sintéticos, tratando de acercarse más a los intereses del niño y respetar sus procesos de aprendizaje. 

Los métodos que debemos utilizar para enseñar a leer a nuestros alumnos son los basados en metodologías mixtas (para trabajar tanto la ruta fonológica como la ideovisual), tratando en todo caso que este proceso de aprendizaje significativo y funcional. 

La actividad práctica que llevamos a cabo en este bloque consistía en elegir un texto no literario con el que elaborar un bloque de actividades para trabajar todos los aspectos de la competencia lectora. 

En este caso utilicé un texto periodístico: “Los leones ganan el campeonato de waterpolo” dirigido a niños de 3º de Primaria. 

He de reconocer que no fue una tarea sencilla, hasta yo misma confundí alguna pregunta de comprensión con otras de memoria a corto, y sobre todo por la elección de las actividades para trabajar la atención y la habilidad visual, que en un principio tanta confusión me generaba. Pero a la vez fue satisfactorio el conocer a través del material que nos facilitó Irune, la cantidad de actividades y recursos tan divertidas e interesantes que podemos utilizar en el aula para entrenar cada una de estas habilidades, así como lo importante que es trabajar de forma distinta los dos tipos de lectura. 

Si hay algo que he podido corroborar tras la realización del Practicum I y II es que en la escuela se insiste demasiado en la lectura expresiva. Un tipo de lectura que no se prepara previamente, que sólo consiste en seguir la lectura entre todo el grupo y sobre la que se pretende realizar un cuestionario centrado en muchas ocasiones en la memoria a corto plazo. 

Sin embargo, lo que no se tiene en cuenta y es algo que he aprendido como futuro docente, es que la lectura expresiva debería utilizarse en aquellos momentos “sociales”, de diálogo, en los que pretenderemos que nuestros alumnos sean comprendidos por el resto mientras leen (ese es el verdadero objetivo de la lectura expresiva), no comprender lo que dice el texto, y en los que cuidaremos determinados aspectos para que el mensaje sea lo más nítido posible. Debiendo prestar atención y utilizar habitualmente aquella lectura “personal”, silenciosa, en la que el alumno lea para comprender el texto que tiene frente a él, intentando hacer inferencias cuando no sepan el significado de alguna palabra, ya sea en al área de Lengua como en el resto de las áreas de conocimiento, así como la importancia de la evaluación de este proceso continuo de aprendizaje que es la lectura. 

BLOQUE 3: Comunicación escrita: la escritura 

En este tercer bloque, abordamos la última habilidad lingüística, la escritura. 

En general, podemos afirmar que aprendemos a hablar de forma natural, mientras que para aprender a escribir necesitamos ir a la escuela. De esta forma, parece lógico pensar que hablar es más fácil que escribir. Sin embargo, después de haber estudiado el bloque 1 de la asignatura, conseguir que los alumnos comuniquen a los demás de forma adecuada no sólo contenidos, sino también emociones y pensamientos, no es fácil y debemos prestar atención a muchos factores. 

“El aprendizaje de la escritura es un proceso psicológico complejo que permite a las personas comunicar ideas a través de signos gráficos que representan los elementos del lenguaje oral. 

La escritura es una actividad que requiere el despliegue de múltiples procesos cognitivos, desde los más abstractos o conceptuales hasta los puramente motores, los cuales posibilitan transformar una idea o un pensamiento en signos gráficos. El lenguaje oral, las habilidades ortográfico-fonológicas y de deletreo, las habilidades visomotrices y del grafismo, la fluidez en la redacción y la propia lectura, son destrezas directamente relacionadas con el aprendizaje exitoso de la escritura” (Rivas Torres & López Gómez, 2017).

Como bien dice Cassany, “unir letras y dibujar garabatos caligráficos es sólo una de las microhabiliidades más simples que forman parte de la compleja capacidad de la expresión escrita”, sólo sabe escribir “quien es capaz de comunicarse coherentemente por escrito, produciendo textos de una extensión considerable sobre un tema de cultura general” 

Por tanto, para aprender a escribir deberemos llevar a cabo los dos procesos implicados en la escritura, por un lado, el desarrollo de la grafomotricidad y caligrafía (que sólo se adquiere con el entrenamiento) con un objetivo meramente formal, y por otro lado, la comunicación escrita, en la que además de la actividad grafomotora, intervienen otros aspectos cognitivos más complejos. 

El maestro debe tener en cuenta 3 factores que están relacionados con aprendizaje y el desarrollo de la grafomotricidad: 

Factores físico-fisiológicos: Referidos al nivel de desarrollo tanto generales (regulación tónico postural y kinésico) como específicos (psicomotricidad fina). En los que es importante trabajar la fuerza, el tono, la localización de movimientos y la velocidad 

Factores psíquico-cognitivos: Teniendo en cuenta la maduración mental; el nivel de desarrollo intelectual; los aspectos perceptivo-motrices y la organización del pensamiento; y el desarrollo afectivo. 

Factores socioculturales: Teniendo en cuenta el tipo de letra usado en el ambiente social que rodea el niño, siendo predominante la letra de imprenta. 

Sabemos que la adquisición de la escritura va ligada al aprendizaje de la lectura, así que, de este modo, al igual que ocurre con la lectura, para aprender a escribir tenemos varios métodos: los métodos de base sintética, analítica constructivista. No obstante, como profesores, es necesario conocer el punto de partida de los niños cuando acceden a Primaria. 

Según el Diccionario de la Real Academia Española, la palabra “caligrafía” viene del griego y tiene dos acepciones: “Arte de escribir con letra bella y correctamente formada, según diferentes estilos” y el “conjunto de rasgos que caracterizan la escritura de una persona, de un documento, etc”. 

La caligrafía como proyección de la grafomotricidad tiene que seguir entrenándose con el objetivo que nuestra letra sea clara y legible, esto es, que aquello que deseamos comunicar de forma escrita, pueda entenderse por todo aquel que lo lea, incluido nosotros mismos. 

Nuestra caligrafía es nuestra carta de presentación, y aunque en nuestra vida cotidiana la escritura  manuscrita esté prácticamente sustituida por los diferentes soportes digitales y audiovisuales, debemos hacer que los niños entiendan que deben mejorar sus elaboraciones manuscritas, para que se les entiendan y alternar con actividades que los niños puedan realizar aprovechando las ventajas digitales como medio de motivación,  para el manejo de los teclados con soltura y el desarrollo de la escritura que posiblemente utilizarán en el futuro, adaptándonos a la vida real. 

Para ello deberemos tener en cuenta los aspectos que inciden en el desarrollo de la grafomotricidad y la caligrafía como son: 

Postura y hábitos: debe tenerse en cuenta la comodidad del niño, disposición correcta del papel (levemente inclinado), codos y muñeca, así como la forma correcta de sujetar el lápiz.

Movimiento gráfico: es un desarrollo kinestésico que hace referencia a los movimientos de avance de izquierda a derecha del papel y a los movimientos de inscripción.

Presión:  debe ser relajada, y evitar la utilización de lápices duros por la debilidad del color y el grueso trazo, evitando la frustración. 

Velocidad: esta aumenta con la edad y el entrenamiento y depende de la orientación, la forma, la longitud de los trazos y el tipo de letra.

Ritmo: desplazamiento armonioso a lo largo del escrito que se desarrolla a través de la experiencia.

Una vez abordado la parte de mecánica de la escritura, es necesario centrarnos en la expresión escrita, partiendo de la premisa de que no pidamos a nuestros alumnos que “hagan una redacción”. Redactar significa poner un texto escrito con coherencia y cohesión, pero que no aporta ninguna información sobre el tipo de texto. De este modo debemos especificar el tipo de texto que queremos (literario o no), de forma que así irán familiarizándose con las características de cada uno de ellos, aunque la elaboración de todos ellos suponga redactar, y que lo hagan con coherencia y cohesión, acostumbrándose a releer todo lo que escriben para revisar tanto la redacción (coherencia y cohesión) como la ortografía. 

 Así que lo que evaluaremos será que lo que el niño quiere comunicar esté escrito con coherencia y cohesión, mostrándoles nuestras impresiones, ya que esto resulta mucho más enriquecedor que decirle si está bien o mal y llevando la escritura a todas las áreas de conocimiento, no dejándola sólo para el área de lengua.  

La actividad práctica que llevamos a cabo en este bloque consistió en el diseño de un entrenamiento por modelado (copiado)  para que niños de 2º, 4º y 6º con leve retraso escritor mejoraran su competencia caligráfica. 

La única forma de mejorar la caligrafía de nuestros alumnos es copiando y repitiendo grafías, palabras y frases, por lo que puede resultar aburrido. Por esta razón las actividades que propusimos para cada uno de los niños tenían que ser motivadoras, teniendo en cuenta sus intereses, haciéndoles comprender que tenían que mejorar su letra para que los demás los entendieran, descartando cualquier comentario afeando su trabajo por tener “mala letra”, no comentándoselo delante de sus compañeros, sino que lo diríamos fuera del grupo. Del mismo modo tampoco realizaría la actividad en clase, sino en su casa, evitando ponerlo en evidencia delante de sus compañeros, y valorando sus avances acompañándolo durante todo el proceso. 

Esta actividad me resultó muy interesante y útil de cara a mi futuro como docente, ya que es muy frecuente que en una clase encontremos a un alumno con mala letra y debemos saber cómo ayudarle; tanto en la elección de materiales a utilizar como en la elección de actividades a desarrollar. 

En lo que respecta a mi experiencia personal, durante el tiempo que he estado realizando las prácticas, tanto en el Practicum I como en el Practicum II, he podido comprobar que algunas de las recomendaciones expuestas anteriormente no son tenidas en cuenta. Sobre todo, porque aún se sigue afeando la letra de un niño delante de los compañeros, como si eso contribuyera a que el niño la mejorara. Pero también he conocido a alguna profesora, especialmente la de este último año que no daba tanta importancia a lo de tener una “letra bonita” mientras esta fuera legible, alegando que “nuestros niños” en un futuro no muy lejano, dejarán de utilizar la escritura manuscrita para pasar a hacer uso del formato digital. 

Como futuro docente, si hay algo que me ha quedado claro estudiando esta asignatura es todo aquello que no haré con mis alumnos y todo lo que podré hacer para que ellos adquieran todas las habilidades lingüísticas, entre ellas,  la escritura, de una forma no tan encorsetada; teniendo en cuenta que lo importante no es que nuestros alumnos tengan una letra bonita, sino que sea legible y clara; y que ésta irá cambiando adaptándola a su personalidad, así que debemos permitir que el niño siga experimentando hasta encontrar aquella con la se sienta cómodo, siempre y cuando sea legible. 

BLOQUE 4: El sistema de la lengua: ortografía y semántica. 

En este tema nos adentramos en el bloque del currículo “Conocimiento de la lengua”, a través del cual mejoramos las cuatro destrezas básicas: hablar, escuchar, leer y escribir. Pero siempre intentando buscar como futuros maestros estrategias que motivaran y que fueran significativas para nuestros alumnos. 

En primer lugar, nos centramos en dos aspectos íntimamente relacionados con la expresión y la comprensión como eran la ortografía y la semántica

“La ortografía puede definirse como el conjunto de normas que rigen la representación escrita, el código gráfico de la lengua” (Labajo, 2021)

Si para el niño no es nada fácil pasar del código oral al escrito, mucho más difícil es acordarse y respetar las particularidades ortográficas de nuestra lengua referidas a la correspondencia entre fonema-grafema, acentuación, mayúsculas al principio de la frase, signos de puntuación, entre otras. 

La experiencia ha demostrado que muchos de nosotros aprendimos ortografía de forma incorrecta, esto es memorizando reglas y excepciones. Aunque nos aprendimos las reglas, para haber conseguido una buena formación ortográfica, debíamos haberlas aplicado dentro de un contexto adecuado, dándole un uso funcional y significativo a través de la lectura y escritura reflexiva (las verdaderas bases de una buena formación ortográfica), teniendo en cuenta que nuestro dominio ortográfico se fundamenta en el recuerdo visual a través de la lectura y la observación, y que sólo en los casos en que no conocemos la palabra, usamos la ruta fonológica (partes de la palabra) y nuestros conocimientos sobre las normativas ortográficas.

De este modo, como profesores no podemos dejar para más tarde que los niños escriban de forma correcta una palabra, o que pongan una tilde o un signo de puntuación, ya que, si se acostumbra a ver mal escrita una palabra, confunde al cerebro y su memoria ortográfica la aceptará de esa forma. 

Partiendo de que las bases fundamentales para el trabajo ortográfico son la atención, la memoria visual y el uso funcional de la escritura, las tareas que realicemos para mejorar la ortografía de nuestros alumnos se fundamentarán en el desarrollo de la expresión escrita y de la creación personal, sin olvidar la importancia de la motivación; dejando de lado las penalizaciones por errores ortográficos, ya que causan justamente lo contrario. 

“La pedagogía actual aboga por un modelo que incluya elementos emocionales, funcionalidad, significatividad, construcción del aprendizaje y unos objetivos claros que fundamenten cualquier tipo de tarea.”  (Labajo, 2021). 

Así,  en lugar de basarnos en dictados tradicionales o en el copiado de palabras, con los que el niño no llega a interiorizar las palabras en su memoria porque no están dentro de un contexto significativo, deberemos tener en cuenta que a la hora de plantear no sólo una actividad ortográfica, sino cualquier actividad, ya sea correspondiente al área de lengua u otras áreas, si no existe reflexión e interiorización, si no hay transferencia de lo aprendido a las situaciones reales de la vida cotidiana (y en el caso de los aprendizajes lingüísticos, a los usos comunicativos académicos y habituales), no se habrá producido realmente el aprendizaje significativo que ha de perseguir el trabajo de cualquier maestro.

De esta forma, a la hora de plantear una actividad a nuestros alumnos, además de tener en cuenta el momento evolutivo del niño, así como sus intereses, debemos tener presente el siguiente esquema de trabajo:

  • PREPARACIÓN
1. Plantearnos unos objetivos específicos (entre 1 y 3).
2. Preparar el material si se requiere. 
3. Pensar cuál es la mejor forma de llevarla a cabo en nuestro grupo (dependiendo de los intereses, capacidades, etc.  de nuestros alumnos)
 
  • PUESTA EN PRÁCTICA
1. Partir siempre de la evaluación inicial ¿Qué conocen los niños del tema, de algunos aspectos concretos…? (Preguntar a los niños sobre ello y ajustar las respuestas a la realidad).
2. A partir de la motivación, explicar la actividad de forma clara.
3. Poner al menos un ejemplo, vosotros mismos o utilizando a niños a los que vais guiando.
4. Dejar que los niños ejecuten la tarea. Si es oral, procuraremos hablar lo menos posible y escucharlos a ellos. Si es escrita, pasaremos por los grupos o por las mesas individuales para fijarnos si están teniendo dificultades y resolver dudas.

  • EVALUACIÓN
1. Si es una actividad objetiva con una sola respuesta posible, se corregirá y se pedirá a los niños que expliquen cómo la han realizado. Las estrategias que han seguido los que la hayan hecho bien, servirán para enseñar a los que la han hecho mal. De esta forma los niños no sólo aprenden los resultados correctos, sino también las formas de obtenerlos. 
Si es una actividad abierta que admite múltiples respuestas, se escucharán algunas y se irán ajustando y mejorando si es que se requiere. También se preguntará a los niños cómo la han hecho, para trabajar las estrategias del mismo modo que en el caso anterior.

2. Como maestros, evaluaremos los objetivos que nos habíamos planteado. Si se han cumplido, si no y por qué.

3. Preguntaremos a los niños si les ha resultado fácil o difícil la actividad y por qué. Si les ha gustado realizarla y por qué. De este modo evaluaremos sus motivaciones y sus capacidades de cara al planteamiento de futuras actividades.

4. Preguntaremos también a los niños qué creen que han aprendido haciendo esa actividad. Para qué creen ellos que sirve. La mejor motivación es siempre la utilidad (aunque nosotros pensemos que es el divertimento). Nunca hacemos con gusto algo que pensamos que no sirve para nada.
Escuchamos lo que dicen y las aplicaciones que ellos hacen y lo completamos nosotros, explicándoles los objetivos iniciales.

Y ahora, vamos a adentrarnos en las palabras, pero no sólo al significado de las palabras (vocabulario) sino también al significado de frases hechas, expresiones habituales…y construcciones diversas en un contexto determinado, es decir, en la semántica

Los niños, de la misma manera que en su día a día escuchan palabras de las que no conocen su significado y hacen hipótesis sobre éste, hacen lo mismo cuando leen palabras que nunca habían visto. 

Nuestra labor como docentes es “afianzar sus conocimientos semánticos, fomentar la aparición de nuevas palabras en la conversación cotidiana en el aula, ayudarles a aprehender el significado de los términos nuevos que aparecen en textos trabajados y hacer del trabajo con el diccionario un juego más” (Labajo, 2021),  contextualizando las palabras dentro de sintagmas, frases o textos. 

Es importante distinguir entre el vocabulario activo, el que utilizamos con frecuencia, y el pasivo, aquel que, aunque no empleamos con tanta frecuencia, comprendemos su significado. En el aula, debemos desarrollar los dos tipos. 

Por otro lado, no podemos olvidar que en los primeros cursos de primaria el alumno imita al profesor, por lo que debemos prestar atención al vocabulario empleado para que de esta forma podamos enriquecer su léxico y contribuir a su aprendizaje.  

La actividad propuesta para este bloque consistió en la preparación, puesta en práctica y evaluación de dos actividades, una para la interiorización de la ortografía y otra para la interiorización de la semántica, teniendo en cuenta el esquema del proceso de trabajo. 

Lo cierto, es que me pareció una actividad divertida y enriquecedora, ya que por primera vez descubrí que enseñar y aprender ortografía puede ser realmente divertido y diferente. Por otro lado, me he dado cuenta de lo importante que es desde el principio el contar con un buen proceso de trabajo en el que se fijen unos objetivos concretos sin olvidar la importancia de la motivación, de que nuestros alumnos compartan las estrategias que han seguido para que todos puedan aprender de todos y del significado que nuestros alumnos den a una tarea. 

En cuanto a mi experiencia personal, tanto en mi etapa escolar como durante el tiempo de prácticas, observé que en lo que respecta a la ortografía, no hemos evolucionado nada. 

Aún recuerdo las veces que tuvimos que copiar una palabra porque la habíamos escrito con faltas de ortografía y la cantidad de ocasiones en las que los dictados sólo eran una forma más de evaluar y penalizar los fallos que tuvieras, y actualmente, la ortografía se sigue trabajando utilizando el mismo método.  

Si hay algo que por suerte estamos aprendiendo a lo largo de cada uno de los bloques de esta asignatura es que, en lo referido a la enseñanza de la lengua, no todo tiempo pasado fue mejor y existen multitud de actividades que podemos llevar a cabo en nuestra aula para hacer que ciertos contenidos del currículo que a veces pueden resultar aburridos o tediosos por parte de nuestros alumnos, como en este caso son la ortografía o el vocabulario, dejen de serlo. 

Como docentes, no podemos seguir penalizando la ortografía como ya hicieron con nosotros, sino que tenemos que tratar de enfocarlos como un modo de aprendizaje de nuestros alumnos, haciendo que no tengan miedo a equivocarse con tal de no escribir una palabra veinte veces. 

Ahora sabemos que no sirve para nada que un alumno escriba una palabra un número determinado de veces o que recuerde una regla ortográfica, si no es capaz de interiorizarlas dentro de un contexto significativo, aplicando lo aprendido a las situaciones reales de la vida cotidiana, sin olvidar la importancia de la motivación en toda actividad que lleven a cabo. 

Por eso, como futuros docentes, es nuestra oportunidad, y no podemos cometer los mismos errores que ya cometieron con nosotros. Disponemos de un amplio abanico de recursos materiales y didácticos con los que enseñar ortografía o semántica, pero siempre teniendo una serie de procesos que incluyen elementos emocionales, funcionalidad, significatividad, construcción del aprendizaje y unos objetivos claros que deberían sustentar cualquier tipo de actividad que llevemos a cabo con nuestros alumnos. 

BLOQUE 5: El sistema de la lengua: Morfología y Sintaxis. 

En el último bloque de la asignatura nos centramos en cómo había que trabajarse y aplicarse en Educación Primaria el nivel morfosintáctico de la lengua. 

En primer lugar, pasaremos recordar lo que era la morfosintaxis: “el conjunto de elementos y reglas que permiten construir oraciones con sentido y carentes de ambigüedad mediante el marcaje de relaciones gramaticales, concordancias, indexaciones y estructuras jerárquicas de constituyentes sintácticas”. 

La morfosintaxis integra dos componentes de la gramática que, aunque se analizan por separado como es la morfología y la sintaxis, son dos unidades que están íntimamente interrelacionadas y son indesligables, de forma que llegaremos a trabajarlas de manera simultánea dentro de una oración. 

De esta forma, los niños en un principio irán aprendiendo la morfología (clases y características de las palabras) para luego pasar a reconocer cada palabra y sus funciones en una oración (análisis sintáctico) de forma reflexiva; sin este primer paso, el análisis sintáctico no sería posible.  

“Los niños han de ir aprendiendo paulatinamente, los nombres y las características de las diferentes clases de palabras y las funciones principales que éstas desempeñan en el contexto de una oración pero siempre de manera reflexiva” (Labajo, 2021)

Se comete el error de trabajar estos contenidos de un solo modo, escribiendo en el cuaderno y memorizando. Por eso, es necesario recordar la importancia de que el niño aprenda no de la memorización de conceptos o la ejecución mecánica de análisis sintácticos de oraciones sin entender lo que está haciendo, sino reflexionando e interiorizando cada una de sus acciones, usándolas como parte de sus comunicaciones orales y escritas. Así se producirá el verdadero aprendizaje gramatical

Aunque existen muchos tipos de actividades para trabajar de forma específica los contenidos de morfología y sintaxis en Educación Primaria, muchos de ellos son poco motivadores, repetitivos, escasamente significativos y poco funcionales, por ello la actividad que se propuso en este bloque fue la selección de 10 páginas web con las que los alumnos de Educación Primaria pudieran trabajar, aprender e interiorizar aspectos de la morfología y sintaxis. 

Esta actividad ha sido muy útil de cara a un futuro pues nos ha servido para descubrir gracias a nuestra búsqueda y la de nuestros compañeros, la gran cantidad de recursos que podemos encontrar en la red con los que trabajar la morfosintaxis, y así contribuir a que las actividades de análisis sintáctico y morfológico sean más motivadoras, convirtiendo el entrenamiento en algo más atractivo y lúdico para nuestros alumnos. 

Además, hemos aprendido que debido a la cantidad de recursos que podemos encontrar, no todas son apropiadas para nuestros alumnos, sino que es necesario prestar atención a los objetivos propuestos, aspectos motivacionales, funcionalidad y complejidad del recurso. 


CONCLUSIÓN FINAL 

Y ahora, sí que llega la despedida. Y me gustaría en un principio empezar dando las gracias por todo lo que he aprendido a lo largo de estos meses. 

Creo que no hay mejor forma de integrar el conocimiento que es llevándolo a la práctica, y con cada una de las actividades que hemos realizado en todos y cada uno lo de los bloques no podemos negar que esto no haya sido así. 

La realización de estas actividades, tan ricas y motivadoras, han supuesto que por un momento nos imaginemos como el profesor que nos gustaría ser, porque estamos convencidos de que la enseñanza de determinadas materias, y en concreto la de Lengua Castellana, se puede hacer de otra forma, pero para ello, es necesario creer en lo que verdaderamente queremos conseguir y querer que esto sea posible. 

Para mí, la implicación y las ganas de un profesor, junto con la ilusión y la motivación con la que llega a clase cada día, unido como no, al conocimiento, hacen de esta profesión la más bonita y gratificante del mundo. Cuando una persona cree verdaderamente en lo que hace y es capaz de despertar en los niños la emoción ante determinadas actividades, el aprendizaje se producirá, porque sin emoción, no hay aprendizaje. 

Por ello, si hay algo que destacaría en el aprendizaje adquirido tras la realización de todas las actividades, es que Irune nos haya enseñado a plantear cada una de ellas teniendo en cuenta siempre los aspectos motivacionales del niño y la necesidad de que todas fueran significativas para el alumno. Algo que, aunque pueda parecer tan sencillo y obvio a primera vista, desafortunadamente no es tenido en cuenta cuando se plantean determinadas actividades en el aula. Y por otro lado, la importancia de la evaluación, no solo la que puede realizar el profesor, sino la del propio alumno, que sirva para conocer el progreso del niño, para que él mismo sea conocedor de su aprendizaje, pero a la vez que sirva para evaluar nuestro trabajo como profesores cuando algunos de los objetivos que teníamos propuestos no han sido cumplidos. 

Por último, no quería concluir esta entrada sin agradecer todos los recursos que esta asignatura nos ha ofrecido, partiendo de los catálogos de actividades de comprensión lectora, hasta las lúdico educativas para trabajar la ortografía y el gran catálogo de páginas web que entre todos hemos creado para trabajar la morfología y la sintaxis. Sin lugar a dudas, seguro que recurriré a cada uno de ellos. 

Y a vosotros compañeros, gracias por el tiempo dedicado con cada una de vuestras aportaciones y por todo el aprendizaje que hemos construido juntos con cada comentario en el blog.

Hasta pronto.  





BIBLIOGRAFÍA

Guía de trabajo de la asignatura "Didáctica de la Lengua Española". Grado en Educación Primaria. Modalidad Semipresencial. Curso 2020-2021. CSEU La Salle

Teoría de la asignatura "Didáctica de la Lengua Española". Grado en Educación Primaria. Modalidad Semipresencial. Curso 2020-2021. CSEU La Salle


martes, 4 de mayo de 2021

DISEÑO DE UN ENTRENAMIENTO POR MODELADO

En esta entrada dedicada al Bloque 3: Comunicación escrita: la escritura, plantearemos el diseño de un entrenamiento por modelado (copiado) para que niños de 2º, 4º y 6º de Primaria con retraso escritor, mejoren su competencia gráfica.  

En general, podemos afirmar que aprendemos a hablar de forma natural, mientras que para aprender a escribir necesitamos ir a la escuela. De esta forma, parece lógico pensar que hablar es más fácil que escribir. Sin embargo, después de haber estudiado el Bloque 1 de la asignatura, conseguir que los alumnos comuniquen a los demás de forma adecuada no sólo contenidos, sino también emociones y pensamientos, no es fácil y debemos prestar atención a muchos factores. 

“El aprendizaje de la escritura es un proceso psicológico complejo que permite a las personas comunicar ideas a través de signos gráficos que representan los elementos del lenguaje oral. 

La escritura es una actividad que requiere el despliegue de múltiples procesos cognitivos, desde los más abstractos o conceptuales hasta los puramente motores, los cuales posibilitan transformar una idea o un pensamiento en signos gráficos. El lenguaje oral, las habilidades ortográfico-fonológicas y de deletreo, las habilidades visomotrices y del grafismo, la fluidez en la redacción y la propia lectura, son destrezas directamente relacionadas con el aprendizaje exitoso de la escritura” (Rivas Torres & López Gómez, 2017).

Como bien dice Cassany, “unir letras y dibujar garabatos caligráficos es sólo una de las microhabiliidades más simples que forman parte de la compleja capacidad de la expresión escrita”, sólo sabe escribir “quien es capaz de comunicarse coherentemente por escrito, produciendo textos de una extensión considerable sobre un tema de cultura general” (Galindo Jiménez, 2012)

Por tanto, para aprender a escribir deberemos llevar a cabo los dos procesos implicados en la escritura, por un lado, el desarrollo de la grafomotricidad y caligrafía (que sólo se adquiere con el entrenamiento) con un objetivo meramente formal, y, por otro lado, la comunicación escrita, en la que además de la actividad grafomotora, intervienen otros aspectos cognitivos más complejos. 

Sabemos que la adquisición de la escritura va ligada al aprendizaje de la lectura, así que, de este modo, al igual que ocurre con la lectura, para aprender a escribir tenemos varios métodos: los métodos de base sintética, analítica y constructivista. No obstante, como profesores, es necesario conocer el punto de partida de los niños cuando acceden a Primaria. 

Según el Diccionario de la Real Academia Española, la palabra “caligrafía” viene del griego y tiene dos acepciones: “Arte de escribir con letra bella y correctamente formada, según diferentes estilos” y el “conjunto de rasgos que caracterizan la escritura de una persona, de un documento, etc”. 

La caligrafía como proyección de la grafomotricidad tiene que seguir entrenándose con el objetivo que nuestra letra sea clara y legible, esto es, que aquello que deseamos comunicar de forma escrita, pueda entenderse por todo aquel que lo lea, incluido nosotros mismos. 

De esta forma deberemos tener en cuenta los aspectos que inciden en el desarrollo de la grafomotricidad y la caligrafía como son: 

Postura y hábitos: debe tenerse en cuenta la comodidad del niño, disposición correcta del papel (levemente inclinado), codos y muñeca, así como la forma correcta de sujetar el lápiz.

Movimiento gráfico: es un desarrollo kinestésico que hace referencia a los movimientos de avance de izquierda a derecha del papel y a los movimientos de inscripción.

Presión:  debe ser relajada, y evitar la utilización de lápices duros por la debilidad del color y el grueso trazo, evitando la frustración. 

Velocidad: esta aumenta con la edad y el entrenamiento y depende de la orientación, la forma, la longitud de los trazos y el tipo de letra.

Ritmo: desplazamiento armonioso a lo largo del escrito que se desarrolla a través de la experiencia.

Una vez abordado la parte de mecánica de la escritura, es necesario centrarnos en la expresión escrita, partiendo de la premisa de que no podemos pedir a nuestros alumnos que “hagan una redacción”. "Redactar significa poner un texto escrito con coherencia y cohesión, pero que no aporta ninguna información sobre el tipo de texto" (Labajo, 2021)  

De este modo debemos especificar el tipo de texto que queremos (literario o no), utilizando términos técnicos concretos, que les permitan adquirir y familiarizarse con vocabulario lingüístico y literario,  aunque la elaboración de cada uno de ellos suponga redactar. Sin olvidar que tienen que hacerlo con coherencia y cohesión, acostumbrándose a releer todo lo que escriben para revisar  tanto la redacción (coherencia y cohesión) como la ortografía. 

Y en este caso, como profesores, lo que evaluaremos será que lo que el niño quiere comunicar esté escrito con coherencia y cohesión, mostrándoles nuestras impresiones, ya que esto resulta mucho más enriquecedor que decirle si está bien o mal y llevando la escritura a todas las áreas de conocimiento, no dejándola sólo para el área de lengua.  

A continuación, pasaremos a detallar el diseño del entrenamiento por modelado que realizarán un niño de 2º, 4º y 6 º de Educación Primaria para que mejoren su competencia caligráfica, no sin antes tener en cuenta tal y como manifiesta (Aljuriaguerra, 1979) que,  “todo niño cuya escritura sea defectuosa, no tiene algún importante déficit neurológico o intelectual que lo justifique. Son niños intelectualmente normales que escriben despacio y en forma ilegible, cosa que les retrasa su avance escolar”. 

La única forma de mejorar la caligrafía de nuestros alumnos es copiando y repitiendo grafías, palabras y frases, por lo que puede resultar aburrido. Por esta razón las actividades propuestas para cada uno de los niños se harán intentando que comprendan que tienen que mejorar su letra para que los demás los entiendan, no comentándoselo delante de sus compañeros, sino que lo diremos fuera del grupo; tampoco realizarán la actividad en clase, sino en su casa, evitando ponerlos en evidencia delante de sus compañeros, y, por otro lado, intentaremos que estas actividades sean motivadoras, teniendo en cuenta sus intereses y valorando sus avances. 

En cada de unos tres casos, las actividades se realizarán de lunes a viernes, y con una duración de 5 a 15 minutos según el curso, evitando convertirse en deberes añadidos. 


A. ALUMNO DE 2º DE PRIMARIA

En el caso de un niño de 2º Primaria, la mala letra con errores en los trazados y menos evolucionados que el resto de sus compañeros, la primera acción que llevaremos a cabo será hablar con él fuera del grupo-clase comentándole la importancia de la corrección, no para tener una letra bonita, sino para que podamos entender lo que escribe. 

Le recordaremos lo importante que es para mejorar la escritura que se sienta cómodo, relajado y sin tensión y que, para ello, tenemos que cuidar determinados aspectos relacionados con:

La postura corporal: espalada recta, y altura de la mesa y silla adecuados a su altura. 


La forma de sujetar el lápiz, cuidando la posición de los dedos y ejerciendo la presión adecuada: 


La disposición del papel ligeramente inclinado y sujetado con la otra mano. 

Aprovecharemos este ratito para preguntarle acerca de sus intereses lectores y así encontrar un tema con el que podamos motivarle con los ejercicios de caligrafía.  Suponiendo que se trata de una niña a la que le gusta leer los libros de Anna Kadabara, elaboraremos un cuadernillo de ortografía con capítulos de uno de sus libros. 

ELECCIÓN DE MATERIALES 

1) Tipo de papel: Para la realización del cuadernillo de ortografía utilizaría un papel tamaño cuartilla (DIN A5) con Pauta Montessori. “Este tipo de pauta se ha convertido en uno de los rayados más populares, especialmente para aprender caligrafía. Consta de cuatro líneas, dos centrales en las que escribir el cuerpo de las letras minúsculas, otra línea por encima de estas y otra más por debajo que sirven principalmente para marcar el límite de las astas ascendentes (b,d,l…) y las descendentes (p,q,g…) y el tamaño de las mayúsculas y los números” (El aula de papel oxford, 2016). 



2) Tipo de útil: Utilizaremos un lápiz blando del número 2. La utilización de lápices duros, debido a la debilidad del color y del grueso del trazo durante la escritura pueden provocarle frustración al niño. Por otro lado, si observáramos que aún así, la niña apretara mucho el lápiz, podríamos ofrecerle un rotulador (tipo Carioca) para que se diera cuenta que si aprieta mucho la punta se abre, y así aprendería a autorregular la presión y de este modo favorecer la escritura. 



3) Tipo de letra: El tipo de letra que utilizaría sería Massallera (extraída de la web mclibre.org). Se trata de una letra que no está completamente ligada, pero facilita la agrupación de las letras en palabras, que hace que la escritura sea más fluida y continua en su trazo (Galindo Jiménez, 2012)



PROCESO DE TRABAJO

-Cada día le entregaremos una parte resumida de uno de los capítulos, intentando que el capítulo termine en un punto interesante de la historia para que ella quiera continuar leyéndolo. Una vez en casa, la niña deberá leerlo y copiarlo en la pauta que le daremos ciñéndose al modelo.  También le diremos, que, si le apetece, puede hacer un dibujo sobre lo que ha leído. “Cuando el niño dibuja está practicando la capacidad para organizar su pensamiento, el contacto y la familiaridad con el uso del lápiz y el dominio del trazo” (Web del maestro , 2013),  de este modo, fomentamos el dibujo en el niño, el dominio de la escritura y la comprensión. 

-No deberá de estar más de 5 minutos copiando, por lo que nos aseguraremos de que el texto a copiar no sea muy extenso. 

-Con la primera hoja que le entreguemos de su cuadernillo, también le entregaremos otra con las recomendaciones (postura, forma de coger el lápiz y disposición del papel)a seguir en casa para que pueda recordarlas cada vez que se ponga a realizar la caligrafía y se las muestre a sus padres (a los que habremos informado previamente del proceso que va a seguir su hija, así como el objetivo que pretendemos conseguir) y un carnet de caligrafía (en el que pondremos sellos motivadores según el trabajo realizado). 

-Al día siguiente, una vez nos entregue la copia hecha, le entregaremos la parte siguiente. 




                                                                        Ejemplo de pauta 


EVALUACIÓN 
La evaluación del proceso de mejora de la caligrafía la llevaremos a cabo a través de la autoevaluación del alumno y la evaluación por parte de la profesora. 

1) Autoevaluación
A través de la autoevaluación, el niño comprobará su progreso, dándose cuenta de aquellos aspectos que tiene que mejorar o aquellos que realiza correctamente. 
Sería recomendable que cuando el niño se autoevaluara estuviera presente alguno de los padres, para comprobar que ha contestado correctamente las preguntas. 

La autoevaluación deberá realizarse cada día y se entregará a la profesora junto con la hoja de caligrafía realizada en casa. 

SI

NO

A VECES

Me he sentado bien para realizar la tarea

He cogido bien el lápiz

He apretado mucho el lápiz

He separado las palabras

Mis padres entienden mi letra

Me ha gustado la tarea

Sigo las pautas que me ha marcado la profesora



Por otro lado, cada día la profesora se reunirá con la niña y dependiendo de las respuestas y del trabajo realizado, le pondrá un sello motivador en su carnet de caligrafía: 



2) Evaluación de la profesora

Por otro lado, a lo largo de la semana, durante la realización de actividades que tengan lugar en el aula, la profesora contará con una tabla en la que irá registrando los siguientes datos: 

SI

NO

A VECES

OBSERVACIONES

Tiene una postura adecuada en la mesa

Coge el lápiz correctamente

Coloca bien el papel

Realiza una presión adecuada

Trabaja a una velocidad y ritmo adecuados

Se entiende lo que escribe



B. ALUMNO DE 4º DE PRIMARIA

Para el caso de un niño de 4º de Primaria que también presenta mala letra, llevaríamos a cabo una dinámica de trabajo muy similar a la anterior. 

De la misma forma que en el caso anterior, nos reuniríamos con él fuera del grupo-clase e intentaríamos motivarle haciendo que comprendiera la necesidad de mejorar sus escritos para que los demás lo entiendan y de la importancia de presentarlos de forma limpia y ordenada.

De este modo le propondremos la realización de una actividad de copiado que contribuya a su mejora y que realizará en casa. Para que la actividad de caligrafía sea más amena y divertida, le preguntaremos por sus gustos e intereses. 
Así, suponiendo que se trate de un niño al que le gusta contar chistes (a esta edad una de las temáticas que más les interesan a los niños es la relacionada con el humor) le propondremos la creación de un libro chistes. De esta forma, tendrá un montón de chistes para contar a sus amigos y con el que ellos también podrán disfrutar leyéndolo. 

ELECCIÓN DE MATERIALES 

1) Tipo de papel: Para la realización del libro de chistes utilizaría un papel tamaño DIN A4 e iría alternando los tipos de pauta de forma progresiva según fuera evolucionando el niño. 
En primer lugar, utilizaría una pauta de 3,5 cm que delimita el alto de las letras, para pasar a una pauta de 2,5 cm, que no delimita las formas ascendentes y descendentes.




2) Tipo de útil: A partir de 3º de Primaria, se amplían los útiles permitidos en la escritura.
El niño pasa de utilizar el lápiz al bolígrafo, y esto puede provocar desajustes en la forma de trazar, y con ello, caligrafías difíciles de leer y un leve retraso en este ámbito. 

El niño utilizará en su entrenamiento el mismo útil que ya utiliza en clase, un bolígrafo borrable. 
No obstante, al igual que en el caso del alumno anterior, si observáramos que el niño ejerciera mucha presión, podríamos utilizar un rotulador estándar. 

Bolígrafos borrables 


3) Tipo de letra: Suponiendo que el niño hubiera aprendido a escribir con un tipo de letra ligada como el caso anterior del niño de 2º de Primaria, el tipo de letra que utilizaría para el entrenamiento por modelado sería una semiligada, similar a la que haya utilizado para aprender a escribir, pero menos infantil, la tipografía Segoe Script: 



PROCESO DE TRABAJO

-Al igual que el caso anterior, cada día le entregaremos al niño dos hojas, una con los chistes que deberá copiar y otra con la pauta, en la que tendrá que transcribir los chistes ciñéndose al modelo.  

-La actividad se realizará en casa, pero deberá entregársela a la profesora al día siguiente para ir observando su evolución. 

-No deberá de estar más de 10 minutos copiando, por lo que nos aseguraremos de que el texto a copiar no será muy extenso. 

-Además, le entregaremos otra hoja con las recomendaciones a seguir en casa para que pueda recordarlas cada vez que se ponga a realizar la caligrafía y se las muestre a sus padres (a los que habremos informado previamente del proceso que va a seguir su hijo, así como el objetivo que pretendemos conseguir).

- Al día siguiente, una vez nos entregue la copia hecha, le entregaremos el ejercicio siguiente.  

-Una vez a la semana, la profesora se reunirá con el niño para comentarle sus progresos o aquellos aspectos que tiene que mejorar, motivándolo para que no pierda las ganas de seguir con su entrenamiento. 

EVALUACIÓN 

De la misma forma que el caso anterior, la evaluación la llevaremos a cabo a través de la autoevaluación del alumno y la evaluación por parte de la profesora. 

1) Autoevaluación

La autoevaluación deberá realizarse cada día y se entregará a la profesora junto con la hoja de caligrafía. Sería recomendable que cuando el niño se autoevaluara estuviera presente alguno de los padres para comprobar que ha contestado correctamente las preguntas. 

SI

NO

A VECES

Me he sentado bien para realizar la tarea

He cogido bien el lápiz/bolígrafo

He apretado mucho el lápiz/bolígrafo

He separado las palabras

Mis padres entienden mi letra

Me ha gustado la tarea

Sigo las pautas que me ha marcado la profesora



2) Evaluación de la profesora 

Durante la realización de actividades que tengan lugar en el aula, la profesora contará con una tabla en la que irá registrando los siguientes datos: 

SI

NO

A VECES

OBSERVACIONES

Tiene una postura adecuada en la mesa

Coge el lápiz correctamente

Coloca bien el papel

Realiza una presión adecuada

Trabaja a una velocidad y ritmo adecuados

Presenta los escritos con orden y limpieza

 

 

 

 

Se entiende lo que escribe



C. ALUMNO DE 6º DE PRIMARIA

A esta edad, los niños sienten la necesidad de diferenciarse del resto. De esta forma, comienzan a cambiar su letra, haciéndola más personal, menos uniformada que la que utilizan los materiales de caligrafía, aproximándose a la escritura definitiva del adulto, debiendo atender al  cuidado y limpieza del escrito y a la claridad de la caligrafía. Sin embargo, también se les exige mayor velocidad, que puede incidir tanto en la legibilidad caligrafía como en el cuidado y limpieza del escrito, ante lo cual deberemos prestar especial atención. 

De la misma forma que en los casos anteriores, nos reuniríamos con el niño fuera del grupo clase para recordarle la importancia de la limpieza y el orden, de tener una buena escritura y de que los escritos sean claros y legibles por los demás. 

En este caso, como actividad motivadora que le lleve a mejorar su letra le propondremos la participación en una revista escolar. De forma que a medida vaya avanzando y progresando en su caligrafía podrá participar en la elaboración tanto a mano como a ordenador de los textos que la conformen.
Para ello, deberá realizar un cuaderno copiando unas noticias que le entregará la profesora siguiendo la pauta marcada y que iríamos retirando según su progreso. 


ELECCIÓN DE MATERIALES 

1) Tipo de papel: Para la realización del cuaderno de noticias utilizaría un papel tamaño DIN A4 e iría alternando varios tipos de pautas (pauta 2,5, cuadrícula 5x5 y folios con una plantilla debajo para escribir recto y respetar márgenes y espaciados) según la evolución del niño. 



2) Tipo de útil: Para la realización de esta actividad, en primer lugar, utilizaríamos bolígrafos borrables para luego pasar al bolígrafo Bic Cristal, que tiene la punta fina y posibilita un trazo más preciso. 


3) Tipo de letra: A esta edad el niño está adquiriendo una letra más personal, aproximándose a su letra definitiva. En este caso, nos fijaremos en el estilo de letra de nuestro alumno y seleccionaremos algunas fuentes para que pueda escoger la que más se parezca a su caligrafía y con la que se sienta más cómodo. De este modo, considerando que ya presente una caligrafía desligada, le ofreceremos estas 3 tipografías diferentes extraídas de la web Dafont.com: 

-Behind blue eyes  




-Simplicity



-Mermaid 




PROCESO DE TRABAJO

-Al igual que en los casos anteriores, cada día le entregaremos dos hojas, una con la noticia que deberá copiar y otra con la pauta, en la que tendrá que transcribir la noticia ciñéndose al modelo.  

-La actividad se realizará en casa, pero deberá entregársela a la profesora al día siguiente para ir observando su evolución. 

-No deberá de estar más de 15 minutos copiando, por lo que nos aseguraremos de que el texto a copiar no será muy extenso. 

-Además, le entregaremos otra hoja con las recomendaciones a seguir en casa para que pueda recordarlas cada vez que se ponga a realizar la caligrafía y se las muestre a sus padres (a los que habremos informado previamente del proceso que va a seguir su hijo, así como el objetivo que pretendemos conseguir).

- Al día siguiente, una vez nos entregue la copia hecha, le entregaremos el ejercicio siguiente. 
 
-Una vez a la semana, la profesora se reunirá con el niño para comentarle sus progresos o aquellos aspectos que tiene de mejorar, animándole a seguir con el desarrollo de la actividad. 

EVALUACIÓN 

De la misma forma que en los casos anteriores, la evaluación la llevaremos a cabo a través de la autoevaluación del alumno y la evaluación por parte de la profesora. 

1) Autoevaluación

La autoevaluación deberá realizarse cada día y se entregará a la profesora junto con el escrito. 

SI

NO

A VECES

Me he sentado bien para realizar la tarea

He cogido bien el bolígrafo

Cuido la presentación

Mis padres entienden mi letra

Me ha gustado la tarea

Sigo las pautas que me ha marcado la profesora


2) Evaluación de la profesora 

Durante la realización de actividades que tengan lugar en el aula, la profesora contará con una tabla en la que irá registrando los siguientes datos: 

SI

NO

A VECES

OBSERVACIONES

Tiene una postura adecuada en la mesa

Coge el bolígrafo correctamente

Trabaja a una velocidad y ritmo adecuados

Presenta los escritos con orden y limpieza

 

 

 

 

Se entiende lo que escribe

Se encuentra motivado con sus progresos

 

 

 

 



CONCLUSIÓN 

Para que el niño aprenda a escribir debe llevar a cabo dos procesos. Por un lado, desarrollar la grafomotricidad y la caligrafía (relacionadas con la adquisición de la forma de las letras y la trayectoria) y por otro, desarrollar la comunicación escrita, en la que intervienen procesos cognitivos más complejos. 
Además, en este proceso de desarrollo de la grafomotricidad intervienen varios factores que están relacionados con el desarrollo de la grafomotricidad, como son los factores físico-fisiológicos (relacionados con el desarrollo general como el desarrollo de la motricidad fina), factores psíquico-cognitivos (relacionados con la maduración menta), así como los factores socioculturales (uso de la letra predominante en el ambiente social del niño).
 
El objetivo de la escritura es comunicar nuestros pensamientos o ideas de forma escrita utilizando un conjunto de símbolos. De esta forma, a pesar de que en la actualidad cada vez utilizamos menos la letra manuscrita, lo importante no es escribir con una “letra bonita”, sino que pueda leerse con claridad, dentro de una presentación en la que se cuide la limpieza y el orden de lo escrito. Esta va a ser nuestra carta de presentación, y es lo que debemos de enseñar a nuestros alumnos, haciéndoles comprender la necesidad de mejorar sus escritos. 


Desafortunadamente, la única forma de trabajar la caligrafía es copiando las palabras, frases, ciñéndose al modelo propuesto, y puede resultar una tarea aburrida. Así que deberemos acompañarlos durante todo este proceso, proponiéndoles actividades que les resulten motivadoras, alabando sus progresos, teniendo en cuenta la personalización de su caligrafía dentro de la claridad y legibilidad, pero, sobre todo, nunca poniéndole en evidencia delante de sus compañeros. 


En lo que respecta a la expresión escrita, debemos partir de la premisa de que no podemos pedir a nuestros alumnos que “hagan una redacción”. Es necesario que les especifiquemos el tipo de texto que queremos (literario o no), de forma que así irán familiarizándose con las características de cada uno de ellos (aunque la elaboración de todos ellos suponga redactar) y que lo hagan con coherencia y cohesión, acostumbrándose a releer todo lo que escriben para revisar tanto la redacción (coherencia y cohesión) como la ortografía. 



BIBLIOGRAFÍA

Guía de trabajo de la asignatura "Didáctica de la Lengua Española". Grado en Educación Primaria. Modalidad Semipresencial. Curso 2020-2021. CSEU La Salle

Aljuriaguerra, J. d. (1979). Manual de psiquiatría infantil . Barcelona : Toray-Masson.

El aula de papel oxford. (enero de 2016). Recuperado el 26 de marzo de 2021, de https://www.elauladepapeloxford.com/pauta-montessori/

Galindo Jiménez, D. (15 de Julio de 2012). La caligrafía en Primaria : Un proyecto de intervención realizado a través del copiado. TFG. La Coruña, España.

Labajo, I. (2021). Tema 3. Comunicación escrita: La escritura . Teoría de la asignatura Didáctica de la Lengua Española .

Marín Vegas, R. A. (2009). Manual de Didáctica de la Lengua y la Literatura. Madrid: Editorial Síntesis. universidad de Barcelona.

Rivas Torres, R. M., & López Gómez, S. (2017). La reeducación de las disgrafías: perspectivas neuropsicológica y psicolingüística. Pensamiento Psicológico, 15(1), 73-86.

Web del maestro . (6 de marzo de 2013). Obtenido de https://webdelmaestro.com/pautas-para-escribir/

https://cuadernos.rubio.net/con-buena-letra/como-mejorar-la-caligrafia-letra-de-los-ninos

https://www.mclibre.org/consultar/primaria/copia/copia_1.html

https://www.elmundo.es/papel/historias/2021/02/24/60366be6fc6c833a738b4633.html

https://www.elauladepapeloxford.com/un-rayado-para-cada-etapa-escolar/#prettyPhoto

https://www.elauladepapeloxford.com/rayados-para-que-sirve-cada-uno/#prettyPhoto

https://dle.rae.es/caligrafía

https://www.dafont.com


Artículo final sobre la Didáctica de la Lengua Castellana

Y después de unos meses de recorrido a través de cada uno de los contenidos de la asignatura y el reto que ha supuesto compartir todo lo apr...